lunes, 14 de junio de 2010

Día 6

Desde anoche que desconozco el paradero de Chuky, no ha aparecido ni a dormir. Temo por la integridad física…de los demás. Espero verlo pronto, noto su ausencia. Como que me acostumbré a su compañía.
Ha sido un día tranquilo. La emoción inicial empieza a mermar pero supongo que el miércoles volverá el cosquilleo.
Alcanzo a dialogar unos minutos con algunos hinchas argentinos y noto un entusiasmo algo riesgoso. Sólo justificado por la certeza de que tenemos el as de espadas. Pero, ojo, deberíamos pensar también en tener alguna vez algo para el tanto, un 3 para ayudar, un mísero ancho falso o mentir bien aunque más no sea.
*Holanda-Dinamarca: Más promesas que concreciones. Como casi siempre, ay, Holanda. Terminó dando una imagen solvente pero durante el primer tiempo pareció un equipo del montón. Dinamarca, un fiasco. Nada, ni actitud, ay, daneses. Dos buenas noticias: el morocho Elia; la recuperación para otros encuentros de Robben. Diviso a lo lejos a Van der Mole y Van der Ola, no tan interesados en el partido como en conseguir otras cervezas. Linda gente.
*Japón-Camerún: Oía antes del partido a ciertos genios del análisis futbolístico quienes extrañamente jamás aciertan ni una y siguen liderando opinión, decir que esperaban de este encuentro un lindo partido ya que ni orientales ni cameruneses sabían especular. Bueno, o aprendieron pronto o estamos frente a otra pavada más urdida por estos cráneos. Partido trabado, carente de ideas, como casi todos hasta aquí. Lo ganó Japón. Lo pudo haber empatado Camerún sobre el final. Un bodrio.
*Italia-Paraguay: Jamás, o contadas veces para ser menos tajantes, se espera ver buen fútbol en un partido en el que juega Italia. Y es casi seguro que, a pesar del respeto que inevitablemente se le tiene por sus resultados, es una de las selecciones más despreciadas por las demás. Vaya a saber uno si por el catenaccio, por la soberbia que parecen irradiar sus jugadores y técnicos o por la antiestética eficacia de su planteo (a estas alturas, toda una identidad bien definida), lo cierto es que no caen nada simpáticos. Con excepción, claro, de ciertos cultores del amarretismo , el antifútbol y el resultadismo a ultranza que quedan al borde del desmayo extático cuando comprueban una y otra vez las innegables capacidades defensivas y el oportunismo de Italia.
Con Paraguay, a pesar de que pareciera esta vez tener un equipo con más juego, convengamos que tampoco se suele aguardar demasiado lirismo. De hecho, solemos emparentar al seleccionado paraguayo más con la garra, el coraje y la fiereza que con la naranja mecánica. “Por lo menos no con la mecánica porque con la naranja yo sí que nos asocio.” me acota Alcides, un enfervorizado hincha guaraní con quien veo el partido.
Sin embargo, el primer tiempo no fue del todo soporífero. Extrañamente, Italia intentaba jugar por abajo y asociarse y Paraguay no encontraba la pelota ni la posición en la cancha. A los 20’ emparejan los guaraníes y poco antes del final de la primera mitad se ponen en ventaja con un cabezazo luego de una pelota parada. Varios italianos piensan en el suicidio al grito de “¡¿Justo a nosotros un gol así?!” Otros no piensan nada.
El segundo tiempo nos sorprende con el cambio del arquero italiano. Se rumorea que es por lesión. Ya imaginamos las casseteras declaraciones del arquero que lo reemplazó (¿jugó con bufanda?): “Nunca es grato entrar por la lesión o el bajo rendimiento de tu compañero” Y uno volverá a preguntarse bajo qué circunstancias pretenden ingresar los suplentes. Sobre todo, los arqueros suplentes.
En la cancha no pasó nada del otro mundo, pero la intensidad con la que se jugó evitó el bostezo. Se veía claramente que Italia empataría más temprano que tarde por ímpetu y porque Paraguay ya le empezaba a tomar el gustito al 1-0 y se retrasó. A partir del empate era casi lógico que Italia lo fuera a buscar con alma y vida. Así también lo defendió Paraguay. Terminó siendo un emotivo empate. Es claro que son dos que ya están en octavos, teniendo en cuenta los otros dos rivales del grupo.
8 de 11. Veremos si me caigo mañana. Ahí voy:
Nueva Zelanda-Eslovaquia: Indescifrable. Me juego por Eslovaquia, 1-0.
Costa de Marfil-Portugal: Portugal, 2-1.
Brasil-Corea del Norte: Brasil, 3-0.

5 comentarios:

marcelo dijo...

A SI QUE CHUKY ESTA DESAPARECIDO?
CONSULTO EN LAS COMISARIAS MAS CERCANAS?
COMO NOS VEN AHORA POR ALLA, LAS ENCUESTAS NOS FAVORECEN?

Geoffrey Firmin dijo...

Las encuestas, coherentemente, están esperando el debut de Brasil y de España.
Las comisarías acá, mi estimado, son de temer. No consultaría allí ni una dirección.
Abrazo!

Oski dijo...

Hoy x hoy despues de cuatro dias de comenzado el mundial es mas probable que un astrofísico encuentre una Jabulani en la orbita de Alfa Orion que al mismísimo Chuky alimentando cuadrúpedos en el Serenguetti, salutes

Geoffrey Firmin dijo...

Sin dudas. Pero a no desesperar. Intuyo que pronto volveremos a saber de Chuky.

marcelo dijo...

CHUKY ES TODO PARA NOSOTROS, CONSIDERO QUE ESTANDO A DOS DIAS DEL SEGUNDO PARTIDO DEBE ESTAR ELUCUBRANDO ALGUNA LOCURA PARA SORPRENDERNOS